Palace

Palace es un cuarteto londinense cuyas canciones vuelan en la misma onda soul-blues meets indie del Jeff Buckley de “Grace”. Con el cantante Leo Wyndham y su voz sedosa, acompañado de la guitarra ambiental de Rupert Turner, que él toca con tono exquisito y vintage, como principales brújulas, crean un entorno hipnótico que ya en sus inicios, cuando el EP “Lost In The Night” (2014), fue descrito como una especie de “Valium sónico”. La nana “Veins” de aquel trabajo, con su vibración atmosférica, fue una prueba concluyente de todo lo bueno que estaba que llegar. El resto de sus melodías teatrales, conducidas por crescendos de épica sutil, echaron más brasa a esa hoguera. Luego llegó el segundo EP, “Chase The Light” (2015), y empezaron a decir de ellos que eran los sucesores de Foals, The Antlers y los extintos The Maccabees. En noviembre de 2016 sacaron su LP de debut, “So Long Forever”, que confirmó los buenos presagios. Estructuras elegantes, intimidad, letras doloridas y pulidas reflexiones. En resumen: “Si Palace fueran un palacio, probablemente serían el Taj Mahal, eso significa que son definitivamente especiales y que aportan algo refrescante” (Radsound). El 12 de julio de este año publicarán su segundo disco, titulado “Life After”. Un trabajo del que han aparecido cinco singles: “Face In The Crowd” en la segunda mitad de junio, “Running Wild” a finales de mayo, “Martyr”, que vio la luz a finales de febrero, y otros dos que lo hicieron en 2018, “No Other” en diciembre y “Heaven Up There” en octubre. Compuesto por once temas, “Life After” se centra, principalmente, alrededor de la esperanza: o dicho en otras palabras, va sobre la pérdida, pero también sobre salir reforzado tras ella y avanzar. “Aunque hay varios hilos conductores en el disco, en el fondo de todo están el romance y el sentimiento de mirar al futuro a través de una nueva lente”, ha declarado su vocalista, Leo Wyndham. “A la vez que eres consciente de lo desconocido, puedes permitirte sentirte esperanzado, fuerte y agradecido por lo que tienes”.