The Chevelles, originarios de Perth, se formaron en 1989 (su primer concierto fue el 15 de diciembre de aquel año), inspirándose para bautizarse en el modelo de coche Chevrolet Chevelle. Su discografía luce media docena de discos (el séptimo parece estar al caer), otros tantos recopilatorios y más de una decena de EPs y singles. A eso hay que sumar centenares de conciertos (en su país, en Europa, en la América del norte y en la del sur), con sus canciones -de guitarras electrizantes y a toda pastilla, voces altas y elevándose, más sección de ritmo como hidratada con bebidas energéticas- convertidas en reclamo delicatessen para cualquier fan de Redd Kross y Cheap Trick. Mucho se ha escrito de estos veteranos del garage / power pop del hemisferio sur, entre otras cosas las tres que aquí enumeramos: “¡Son The Who meets Ramones meets The Easybeats meets “Diversión en la playa”! ¡Son los criminales que Australia quiere enviar de regreso a Inglaterra! ¡Son los sumos sacerdotes del culto a la diosa del amor Barbarella!” (Steve Van Zandt); “Estad atentos, The Chevelles podrían ser los nuevos Hoodoo Gurus” (Rolling Stone);“Estribillos en abundancia y un montón de guitarras ardientes” (Bucketful Of Brains).