Emma-Jean Thackray apunta a next big thing del jazz británico, con todo a su favor. De hecho, ya está, como suele decirse, en boca de todos. Y más todavía tras la salida en abril de este año de su segundo disco, “Weirdo” (en el sello Brownswood Recordings, el de Gilles Peterson, bajo la licencia de Warner Music UK). Visionaria productora, compositora y multiinstrumentista (con la trompeta como principal aliada), conocida por desafiar los límites musicales, con “Weirdo” se ha zambullido en una exploración profundamente personal y original del duelo y la gratitud. Lo ha hecho con una mezcla ecléctica de influencias (grunge, pop, soul, p-funk y jazz) que suena a celebración triunfal de la supervivencia y la individualidad. Escrito, interpretado, grabado, mezclado, producido y arreglado íntegramente por Thackray en su apartamento del sur de Londres (ella nació en Leeds), el álbum es un testimonio de su extraordinaria musicalidad y su intrépida autoexpresión.
A lo largo de su carrera Emma-Jean ha ido creando un sonido muy espiritual que la lleva al jazz fusión y al jazz- funk de la década de los setenta y desde ahí ella genera una versión de jazz moderno particularmente orientada hacia la pista de baile. Seguidora del taoísmo, ha descrito su visión creativa de la siguiente manera: "Todo lo que publico gira alrededor de un mantra musical para mover la mente, el cuerpo y el alma".
Ya con sus dos primeros EPs, “Walrus” (2016) y “Ley Lines” (2018), recibió críticas entusiastas de nombres como Gilles Peterson, Theo Parrish y Jamie Cullum. Luego ha publicado dos más, así como un disco de debut, “Yellow” (2021), que llegó al # 1 de las listas británicas de jazz y al # 3 en las de discos independientes. Un mes antes, en junio, tras su actuación en el programa de la BBC Two "Later... With Jools Holland" había sido fichada por la rama británica de la discográfica Warner (aunque "Yellow" todavía salió en su propio sello, Movementt).
De "Yellow" se han escrito loas como estas: “Una mezcla fascinante de jazz espiritual y brass band que puede sonar completamente psicodélica sin por ello sostenerse sólidamente en sus ingeniosos arreglos” (Pitchfork), “Es el tipo de álbum del que los puristas posiblemente se burlarán por su accesibilidad y ‘poptimismo’, pero da la sensación de que, de todos modos, Thackray no los querría como fans. Todo lo que quiere de sus oyentes son oídos abiertos, corazones abiertos y mentes abiertas. Si los tiene, "Yellow" es un boleto de ida para sentirse bien con la vida y la humanidad, para variar” (Beats Per Minute). Por su parte, las de “Weirdo” no van a la zaga: “Ante un dolor inimaginable, la británica ha respondido de la única forma que sabe: con un álbum de jazz-funk alegre, repleto de melodía, colores vibrantes y un fino sentido del humor” (Pitchfork); “A lo largo de su carrera se está centrando en la inspiración y el empoderamiento, y tanto sus letras como su música iluminan con luz propia los rincones más oscuros de sus momentos más desesperados, mostrándonos las rutas que utilizó para salir adelante y permitiéndonos seguirla cuando queramos o necesitemos. Este magnífico LP no solo va a salvar la vida de Thackray” (The Quietus).ç