El británico Joe Jackson es la versión actual (y/o también la del final del siglo XX) de George Gerswhin. Con un pie en la música popular y el otro en el reino de la música clásica, ecléctico y camaleónico, a Jackson se le puede considerar uno de los tres grandes exquisitos de la new wave, junto a Elvis Costello y David Byrne, los tres tan relevantes ayer como hoy.